Listos para despegue, Ryanair 9673

Hola a tod@s:

Cada vez pasa más tiempo desde que escribo una entrada hasta que vuelvo a actualizar, pero la verdad que si no lo hago antes no es porque no quiera, si no porque realmente me es materialmente imposible por el tiempo o por otras circunstancias.
Para empezar, como sabéis, estoy en un hotel, compartiendo habitación con más gente, y además con bastantes problemas para conectarme a internet, con lo cual todo eso hace que el poder escribir una entrada en el blog sea tarea más que complicada.
En cualquier caso, aquí estoy, escuchando un poco de "La Oreja de Van Gogh" y dispuesto a contaros cómo han sido estos últimos días por aquí, por Roma.

Empezamos los vuelos "Supernumerary". Estos vuelos son vuelos que tienes que cubrir para terminar tu formación. En total tienes que cubrir 12 sectores. Cada sector es un viaje de A a B, con lo cual hemos estado 3 días volando 4 sectores por día. Entre mis destinos: Paris, Santander, Leipzig, Milán...

He de reconocer que la gente en esta base es maravillosa, o al menos la que he conocido hasta ahora. Me imagino que habrá de todo como en la viña del Señor, pero por el momento no me puedo quejar. Todos me han tratado fenomenal, explicándome todas las dudas que tenía.

El primer día fue el más complicado. No por la duración del vuelo o por algo así, si no porque era el primer día y tanto yo, como mi compañero de prácticas, estábamos más perdidos que un pulpo en un garaje. No sabíamos ni por donde nos venían. A parte de eso, pagamos la novatada y nos olvidamos encima de la cama del hotel, la comida y la bebida para todo el día. Well done!!!
La tripu de ese día fue genial. Nuestro Número 1, Fabio, se portó genial con nosotros y nos ayudó muchísimo en todo, incluso en las preguntas que se hacen antes de cada vuelo para ver si estás apto para volar. No nos preguntó cosas muy difíciles, si no cosas muy básicas sobre seguridad y primeros auxilios.
El vuelo salió normal, aunque es bastante difícil hasta que pillas un poco en que orden se vende cada cosa, que va antes, que va después, quién hace cada cosa... eso sí, cuando lo pillas es maravilloso!.

El día, sin agua y sin comida, fue largo, pero aprendimos mogollón y nos trataron fenomenal. ¡Gracias chicos!

El segundo día nos daba miedo, porque todo el mundo nos había dicho que era el vuelo más largo que hace la compañía en esta base. Roma - Santander, Santander - Roma y después Roma - París, París - Roma.
David, el chico húngaro y compañero mío en estos vuelos, y yo estábamos asustaditos por la duración del día, pero he de reconocer que gracias a las fantásticas compañeras de tripulación que tuvimos ese día, se convirtió en el mejor día de todos los supernumerary. ¡Qué maravilla!.
Dentro de esa tripu había una chica española, Laura, que se portó fenomenal conmigo y me ayudó mogollón en todo. A parte, nuestra sobrecargo, nos dejó hacer mogollón de cosas y eso nos motivó muchísimo. Tanto que fue el día que más vendimos a bordo del avión.
Espero que coincidamos mucho más con esta tripulación, porque además de ser geniales son divertidas. Digo divertidas porque este día fue el día que pagamos las novatadas a bordo. Somos nuevos, y aquí, como en todos los sitios, se estila lo de hacer novatadas. Entre ellas, llevar una CocaCola a la fila 13 del avión cuando en Ryanair no hay fila 13 por superstición... Gracias a Giuseppine!.
Por cierto, en este vuelo, y como parte de nuestro aprendizaje, aterricé de nuevo en cabina junto con los pilotos. Ya se me empieza a hacer rutinario (es broma) después de 5 veces, pero siempre me fascina como el primer día...jejeje

En el último día el cansacio empezaba a notarse. 4 despegues y 4 aterrizajes por día son bastantes para un cuerpo que no está acostumbrado, y cuando llegas a casa estás destrozado. Así que el último día se presentaba corto porque los vuelos no eran muy largos, pero de nuevo coincidimos con una gente extraordinaria a bordo.
Para empezar, una española a bordo, Gema, otra chica fantástica que me trató de maravilla y me ayudó muchísimo en todo.
Por otro lado, Adriano, un tío cojonudo, que junto con otros cuantos azafatos tienen una banda de música para hacer canciones para la compañía e ir a los eventos de la empresa, y que curiosamente, estaban buscando batería para el grupo. Así hablando y hablando, llegamos al tema de la música y resumiendo, que me parece que seguiré tocando la batería por estas tierras italianas...jejejeje
La tripulación en este día fue muy buena también. Nuestro sobrecargo, parecía un tío muy serio, pero después veias que no. Era un tío exigente, pero que en el fondo era bastante simpático.
Como guinda final al pastel de estos vuelos, en mi último vuelo de Genova a Roma, el capitán y el sobrecargo, me invitaron a hacerme un vuelo entero en cabina. Desde el rodaje, despegue, vuelo, aterrizaje y llegada. Es para asegurar los conocimientos del equipamiento en cabina.
Así que nada, en el vuelo de ida mi compañero, y en el de vuelta yo, nos hicimos un vuelo de una horita en cabina. Nunca había vivido un despegue desde allí, y la verdad es que es maravilloso.

Volvimos a la base, donde nos dijeron que habíamos aprobado los vuelos de prácticas que podríamos empezar a volar. Nos dieron nuestras claves para entrar en la intranet de la compañía y ver nuestro horario de trabajo. Me encantó oir de mi jefe "Congratulations and Good Luck".

Desde aquí solo puedo decir que muchas gracias todas las tripulaciones que nos han aguantado estos días con nuestros fallos y que nos han sabido explicar tan bien este trabajo tan interesante y a la vez complicadillo. ¡Gracias!

Ahora, nada más, nos iremos para casa a pasar las navidades allí si todo va bien y cuando tengamos un vuelo bueno para ir a España. De momento, aprovecharemos estos días para solucionar el tema de la casa, papeleos y demás. Por el momento os adelante que 4 españoles (2 chicas y 2 chicos) nos iremos a vivir a un dúplex con 4 dormitorios y 2 baños... 250€ todo incluído a 10 minutos de Roma... ¡Inmejorable!

Para terminar, me gustaría exponer una reflexión que hice el otro día según despegábamos hacia Santander.
Para todos aquellos que lean este blog. Los sueños están para cumplirse, no para soñarlos solo. A veces es difícil dar el primer paso. En ocasiones tienes que dejar detrás muchas cosas (familia, amigos, y posiblemente hasta un trabajo), pero si no te arriesgas nunca sabrás lo que pasa. Si quieres hacer algo en tu vida, hazlo. NO esperes, simplemente hazlo, disfrutalo y después podrás decir que lo intentaste.
Yo lo hice, di el paso, dejé muchas cosas atrás y ahora mismo puedo decir que estoy mucho más cerca de mi sueño. No será fácil conseguirlo, pero por el momento estoy un poquito más cerca de las nubes.

Además de eso puedo decir algo que no todo el mundo puede, ¡¡tengo el trabajo con las vistas más bonitas del mundo!!

Nada más por el momento, nos veremos muy prontito...

Gracias por volar con nosotros...