Ya esta hecho. Ya no hay vuelta a atrás. Ya se puede decir que, a falta de que me pongan las "Wings" o Alas, que es el emblema que certifica que puedes volar, soy Tripulante de Cabina de Pasajeros de Ryanair.
No ha sido un camino fácil. Mucho estrés, mucho cansancio, muchos nervios, muchos dolores de cabeza, pero al final, todo eso tiene su recompensa y aquí estamos. A puntito de empezar a hacer las maletas y empezar nuestra vida en Roma.
Solo dos días más de clase sobre ventas a bordo, y todo habrá terminado. Dos horas y media de vuelo hasta Italia, y allí empezaremos nuestra nueva aventura. ¡Me encanta!. Os contaré cómo han ido pasando las cosas...
La última vez que escribí, estábamos preparando el "Conversion Exam". Han sido unos días muy largos, y la verdad es que el sentimiento con el que terminé de preparar el examen fue muy bueno. Pocas veces he sentido esa sensación, antes de un examen, de que te lo sabes absolutamente todo, que da igual por donde te pregunten porque te lo sabes. La verdad es que uno va muy tranquilo a un examen así, y aunque me daba miedo esa sensación de seguridad, al final todo fue bien.
El lunes a las 9 de la mañana estábamos todos sentados en nuestras mesas. Encima nada más que dos bolis y el pasaporte, requisito indispensable para poder ir a clase cada día.
Llegó el examinador. Un señor que parecía, a priori, bastante majo y sobre todo bastante realista. Quiero decir, que es de esas personas que valora tus conocimientos y no cuanto eres capaz de memorizar un libro... No sé si me explico...
Repartió los exámenes, explicó las típicas normas de un examen, nos dió el tiempo y empezamos. A las 9:15 de la mañana, me disponía a dar la vuelta a mi examen. Por delante unas 50 preguntas, de las cuales unas 35 eran tipo test y unas 15 de desarrollar.
Empecé por el final, y es que, aunque no es lo normal, en este caso era lo más inteligente, ya que solo la última pregunta valía 60 puntos de los 200 que había que conseguir o por ahí...
Después de realizar la última pregunta completamente correcta, empecé con las preguntas tipo test. Muchas a pillar, pero otras bastante lógicas. Justo al terminar con el test, comencé las preguntas de desarrollar. Algunas muy largas, otras más escuetas, pero sobre todo escribiendo lo más rápido posible, ya que el tiempo corría en nuestra contra.
Por fin terminé. Un repasito a todo, y a 15 minutos para el final, estábamos listos. Ahora era hora de irnos a casa, intentar relajarnos y sobre todo, no pensar mucho en el examen hasta las 3 de la tarde, hora en la que nos habían citado en el Centro de Entrenamiento.
Nos fuímos a casa, y allí, para desconectar un poco, no se nos ocurrió otra cosa, a mi compañero de piso y a mí, que ponernos a hacer avioncitos de papel y tirarlos por el balcon (con uno de nosotros abajo para recogerlos). Fue divertido, y sobre todo nos ayudó para desconectar ese ratito mientras esperábamos la nota.
Las 14:30 llegaron enseguida, y llegó el momento de ir a recoger la nota. ¡Qué tensión!.
Llegamos a clase y nuestro instructor salió para decirnos que todos los exámenes estaban corregidos y que en 5 minutos empezaría a decir las notas.
Después de ese tiempo, el instructor y el examinador nos mandaron entrar a todos en clase. Esto era raro, ya que en el "Initial Exam", nos mandaron ir entrando de dos en dos, con lo cual algo raro estaba pasando, y además parecía algo bueno.
Las sonrisas empezaban a esbozarse en las caras de todos nosotros, nos imaginábamos cual era la razón por la que nos habían metido a todos a clase, pero no queríamos aventurar acontecimientos, por si las moscas...
El examinador se sentó en la mesa, y con un gesto bastante amable, nos dijo que después de mucho tiempo corrigiendo y analizando cada pregunta contestada por cada uno de nosotros, estaba muy orgulloso de nuestro trabajo porque ¡¡TODOS HABÍAMOS APROBADO!!... Yo, en concreto, con un ¡¡99%!!
El grito en la clase, los abrazos y los aplausos estuvieron sonando durante varios minutos. Al final, el examinador nos dió la enhorabuena, reconoció que las notas habían sido muy altas y felicitó a nuestro instructor, sin el cual no habríamos llegado a donde hemos llegado. Es su primer curso, per la verdad es que parece que lleve dando clase toda la vida. ¡Gracias Fergal!
Después de que todos nos felicitáramos y vieramos nuestros exámenes y nuestros fallos, llegó el momento que todos llevábamos esperando durante muchos días. Llegó el momento de la entrega de uniformes. Fergal, nuestro instructor, nos dijo que fueramos a abrir las cajas de los uniformes al Hall del Centro de Entrenamiento, y como una estampida todos fuimos para allí. La verdad es que ahora cuando veáis la foto, me vais a decir si no os recuerda al Día de Reyes, cuando eramos pequeños y abríamos los regalos con nuestra familia. Fue increible.
Abriendo las cajas de los uniformes después de saber que todos habíamos aprobado el examen final |
Claro, teniendo en cuenta el tema, os podéis imaginar cómo sale todo cuando lo sacas de la maleta...
Una vez que vimos que todos los uniformes estaban correctos, nos fuímos a casa, con nuestras maletas, más contentos que unas pascuas...jejejeje
Al llegar a casa, pues lo típico que si mira como me quedan estos pantalones, que si el bolsillo de mi camisa parece el bolsillo de Doraemon, que si madre mía la tela de este pantalón es muy dura... Pero lo peor estaba por llegar...
Llegó el momento de localizar una plancha. La encontré. Y llegó el momento de ver cómo narices se plancha un traje... Nada, es muy complicado. Ahora mismo, antes también pero ahora más, admiro a mi madre y a todas las madres del mundo que son capaces de dejar una camisa completamente perfecta en unos minutos. Desde luego yo ayer, lo intenté, lo volví a intentar, lo reintenté...y solo conseguí acercarme mucho a lo que era mi idea de cómo tenía que dejar la camisa.
Después de andar a vueltas con el uniforme, nos fuimos a cenar por ahí porque nos lo merecíamos. Fuimos a un restaurante que hay aquí cerca, y yo me comí un buen filetaco aleman con su patata al horno y todo. Simplemente maravilloso. Después, que mejor manera de celebrarlo, que con unas buenas cervezas alemanas y con toda la gente de la clase...
Crew Bag |
Hoy nos hemos levantado a eso de las 11 de la mañana. Nos han dado permiso porque la clase de hoy era muy corta y podíamos ir más tarde. Hemos comido, nos hemos duchado y nos hemos puesto el uniforme. Después hemos empezado la dura tarea de hacer la maleta de tripulación. Realmente es increíble todo lo que tiene que llevar un tripulante en la maleta del día a día por ley, que si kit de primeros auxilios, kit de costura, limpiador de zapatos, chaleco de alta visibilidad, unos calzoncillos de repuesto, unos calcetines de repuesto, un neceser de viaje con kit de afeitado, de ducha y cepillo de dientes y un conjunto de ropa para poder estar en la calle en caso de que tengas que dormir fuera de casa por alguna razón. La verdad es que lo complicado de todo esto, es meterlo en la maleta, que no es precisamente grande, junto con tu manual de procedimientos de la compañía...
Además al montar en el autobús te sentías como si fueras parte de una tripulación más y estuvieras de camino al aeropuerto para coger tu primer vuelo del día. La sensación inmejorable.
Spanish Crew |
En el día de hoy, la clase ha sido más bien tranquilita. Nos han explicado un poco como se debe hacer el embarque en el avión, revisar tarjetas de embarque, mirar pasaportes, etc, etc...
Hemos hecho una práctica en clase en la que todos eramos pasajeros y otros pocos eran tripulantes que nos revisaban las tarjetas de embarque y poco más...
Después, nos han ido explicando, en función de a donde vamos destinados, cómo van a ser estos días.
En mi caso, el viernes me voy a Roma por la mañana. Allí nos recibirá nuestra jefa, y después nos iremos al hotel.
Al día siguiente, sábado, tenemos la visita a la base, donde supongo que nos enseñarán cómo es el aeropuerto, por donde entran y salen las tripulaciones, cómo pasar los controles de seguridad y lo más importante, nuestra programación de vuelos para los días de práticas. Después domingo y lunes, en principio, "Off".
El martes, si todo va como me imagino, tendré mi primer vuelo de prácticas. Estos vuelos se les llama "Supernumerary", y son vuelos donde puedes preguntar todo lo que quieras, puedes investigar todo lo que quieras en el avión, puedes, incluso, volar en la cabina de los pilotos... No dudéis que si se puede, lo haré...jejejeje... En fin, son vuelos para que te sueltes en el avión te habitues, demuestres lo que sabes, y practiques todo lo aprendido en el curso en forma de papel.
Si todo va como nos han dicho, el jueves terminaré mis vuelos de prácticas, ya que solo son necesarias por ley 12 vuelos del punto A al B. Si todo va como lo planeado, por tanto, el jueves haré mi último vuelo. Después, vacaciones por un mes. Aprovechar para ir a España, recordar las buenas dotes culinarias de mi madre, cambiar la ropa y volver a Roma para el 6 de enero, empezar a volar como un miembro más de alguna de las muchas tripulaciones que ese día cruzarán el cielo de una parte a otra del mundo.
Por ahora, nada más que un par de días de clase sobre ventas a bordo, un examen de estas clases bastante asequible si lo comparamos con lo anterior, y por supuesto, el momento más importante, nuestra entrega de las Alas. A partir de ahí, ya podemos "volar" de verdad...
Estoy terminando ya, pero no quiero despedirme sin dar las gracias a toda la gente que me ha demostrado su cariño, afecto, apoyo, ánimo, etc, etc... durante todas estas semanas y en especial en estos últimos dos días. Me sabe mal no haberos podido contestar a todos, uno por uno, pero creedme que aquí el tiempo es muy limitado, y lo poco que tienes lo debes invertir en estudiar, estudiar y después, estudiar.
Por tanto, si me lo permitís, me gustaría daros las gracias, pero no unas gracias normales, no, unas GRACIAS así de grandes, que se vean desde España. Familia, amigos, excompañeros de la radio, coreros, en fin, mucha gente que día a día me han estado demostrando que están ahí, y porque no, me han dado la fuerza que aquí a veces te falta para seguir adelante y que ellos fueran el motivo por quien hacer esto. A todos vosotros, ¡¡GRACIAS!!.
También me vais a permitir que de las gracias a una persona que ha sido nuestra guía durante todos estos días. Nuestro instructor, Fergal McKenna. Una gran persona, sobrecargo en Madrid, y con el que ha sido un auténtico placer compartir estos días. Nos ha enseñado todo lo que sabe y mucho más, y siempre ha estado ahí para cualquier cosa que nos haya podido hacer falta. Thank you Fergal!!!
Nuestro instructor. Una gran persona. Fergal McKenna |
No me despido, porque seguiré escribiendo. Aún nos quedan dos días más y quien sabe si en ese examen de ventas, suspendo y me vuelvo para casa... Esperemos que no!...jajajaja
Me despediré además, con mi último post el jueves, el día antes de irnos hacia Roma.
Ahora, me voy a ir a la cama, que ya va siendo hora y por fin un día me puedo ir a la cama pronto...jajaja
Un abrazo!!!
Gracias por volar con nosotros...